Cómo mejorar la manera de invertir tu tiempo

Posiblemente muchas veces durante el día te has parado a pensar en qué podrías hacer para aprovechar al máximo el tiempo. Puede que hayas utilizado la típica expresión “me falta tiempo”, bien porque no puedes abarcar con todo aquello que te habías planificado o simplemente no encuentras la forma de planificarte bien las cosas y a la hora de llevarlas a cabo no aprovechas bien el tiempo que tienes.

En mi caso, estas semanas que he tenido que ausentarme por motivos personales, me ha pasado algo semejante.  Tuve un imprevisto, algo que no esperaba que ocurriera, así que por no haber realizado una previa preparación de aquello que tenía que hacer durante la semana, tuve que posponerlo todo  y con ello se me fueron muchas horas y días, que prácticamente he perdido.

Esto nos puede ocurrir a todos en ciertos momentos, y la clave está en tener una buena preparación y planificación. Al igual que ocurre con las tareas cuotidianas de cada uno, lo mismo ocurre cuando iniciamos nuestra búsqueda de empleo. Si todos los días no seguimos una rutina y nos establecemos unas horas para esta tarea en concreto, al paso de las semanas, las horas que invertíamos en este proceso pasaran a ser minutos y al final por una  mala planificación y poca motivación ante tantas negativas, dejaremos este proceso y sucesivamente otros.

Para que todo esto no ocurra día tras día, podemos seguir algunas pautas, en principio lógicas, pero que si de vez en cuando no nos las recuerdan,  vamos dejando de lado la buena rutina y caemos en malas prácticas. Así que hoy te propongo estos pequeños consejos que al igual que a mi me están ayudando, puede que a ti también.

1.      Lleva a cabo una agenda: En ella puedes ir anotando tanto tus objetivos a corto plazo como a largo plazo. Todas las tareas que vayas realizando durante el día y luego puedes comprobar que eres capaz de realizar aquellas actividades que te habías planificado en un momento determinado.

2.      Prioriza tus tareas: Es necesario realizar las tareas más importantes que tengas que hacer y comenzar la jornada por llevar a cabo estas y no aquellas que son más cortas, fáciles o agradables. Para ello debes distinguir entre:

-         Tareas importante-urgente

-         Tareas importante-no urgentes

-         Tareas no importantes-urgentes

-         Tareas no importantes – no urgentes

Una vez tengas claro cada una de tus tareas en que “sección” debería ir, hazte una lista de ellas enumerándolas y empieza por ese orden. Si te has marcado 10 y ves que se está terminando el día y no has podido realizar las 10, no te preocupes, porque las más importantes-urgentes seguro que las habrás realizado. Has hecho todo lo posible por realizar el mayor número de actividades, así que has cumplido con el objetivo que te habías marcado. No puedes estresarte por no realizarlas todas, porque ese estado sólo te traerá negatividad interior. Haz una nueva lista para el día siguiente y así sucesivamente.

3.      Créate un horario: Es muy importante que tengas un horario que sea flexible para poder realizar aquellas actividades que en un momento determinado no has podido realizar por pequeños imprevistos que te han surgido. Este horario te ayudará a visualizar aquello que tienes que realizar en cada momento del día y a organizar tu tiempo de forma óptima. En él puedes agrupar las tareas por bloques.

4.      Se eficiente/eficaz: Intenta realizar las tareas con la mayor calidad posible y concentración adecuada. Este es uno de los factores clave en el aprovechamiento del tiempo o por el contrario en la pérdida de tiempo. Si empleas mucho tiempo en una tarea, pero es tiempo de calidad, habrás invertido el tiempo de forma adecuada.

5.      Céntrate en la tarea que realizas en ese momento: La concentración es otro de los factores primordiales a la hora de realizar una tarea. De ella va a depender si la tarea cuesta más o menos tiempo.

Si de pronto viene a tu mente una idea que necesitarás en otro momento, intentar tener al lado un papel y lápiz, déjalo anotado y vuelve a concentrarte en tu tarea. De no hacer esta práctica, la idea irá yendo y viniendo todo el tiempo por tu cabeza y la concentración se irá perdiendo progresivamente.

Espero que te haya resultado interesante, ¡hasta pronto y gracias por seguirme!